La empresa de telecomunicaciones China Mobile ha dado un paso significativo en el ámbito de la tecnología espacial al colocar en la órbita terrestre baja dos satélites experimentales el pasado sábado. Estos satélites tienen el propósito de llevar a cabo pruebas de la red integrada de comunicación espacial y terrestre, según lo informado por medios estatales.
El primero de los satélites, el China Mobile 01 Star, marca un hito al convertirse en el primer satélite de procesamiento de señales del mundo equipado con un sistema que permite verificar la integración de la tecnología 5G Tierra-espacio. Esta innovación promete revolucionar la manera en que se transmiten y procesan las señales en el espacio.
Por su parte, el segundo satélite, denominado Star Core, es pionero a nivel mundial al contar con un sistema de red central satelital basado en una arquitectura autónoma distribuida para la tecnología 6G. Esta tecnología representa un salto adelante en el desarrollo de redes espaciales avanzadas, abriendo las puertas a una plataforma para las futuras redes espacio-Tierra.
Ambos satélites están posicionados a tan solo 500 kilómetros sobre la superficie de la Tierra, una altitud que ofrece numerosas ventajas en términos de baja latencia y altas tasas de transferencia de datos. Esto contrasta con los dispositivos que operan en órbitas más altas, como aquellas de 36.000 kilómetros, donde se enfrentan a mayores retardos y limitaciones de rendimiento.
El lanzamiento de estos satélites experimentales marca un paso importante en el avance de la tecnología de comunicaciones espaciales, estableciendo nuevas fronteras en la conectividad global y sentando las bases para futuras innovaciones en el ámbito de las redes de comunicación. China Mobile continúa liderando el camino en la exploración y aplicación de tecnologías avanzadas para mejorar la conectividad en todo el mundo.