Sin Censura.
Por: Víctor R. Hernández
De nueva cuenta, como hace un para de semanas, el nombre del gobernador Esteban Villegas se encuentra en las piezas informativas de la prensa nacional o en los programas noticiosos. El tema: la confesión de que el gobernador de origen priista es Claudista.
El lunes, por ejemplo, Carlos Loret, en su programa de noticias sostiene: “Ya no hay gobiernos de oposición” y recupera parte del mensaje pronunciado el sábado en la Velaria:
“Pongámonos de pie para brindarle un fuerte aplauso a la presidenta de todos los mexicanos Ayúdenme, por favor, a ponernos de pie y brindarle un aplauso fuerte, sincero a la presidenta de México. A la primera presidenta de este país. “Presidenta en Durango se le quiere y se le respeta y aquí tiene su casa. ¡Presidenta, presidenta, presidenta, presidenta! “Aquí en Durango, estamos unidos, presidenta”. Aunque, quizá, somos de partidos diferentes, escúchese bien: yo soy Claudista…”
Esteban Villegas
En la página 38 del libro “Sobre la Educación en un Mundo Líquido”, Sygmunt Bauman, aunque se refiere, en su reflexión filosófica, al capitalismo tecnonihilista, ofrece elementos suficientes para ubicarnos, como ciudadanos, en el momento que vivimos hoy dentro del régimen de la mal llamada 4T o morenista:
“Magatti describe el nuevo escenario:
“Y no existen el centro y la periferia, lo alto y lo bajo, lo correcto y lo incorrecto. El capitalismo tecnonihilista tiende a incorporarlo todo, incluyendo lo que se produce en sus propias periferias, e incluso lo que se le opone. Ya no existe la contracultura porque «todo es producción cultu-ral». Hoy día la contracultura constituye una forma de novedad que enriquece la variedad y como tal se incorpora dentro del sistema.” Y si el nuevo sistema que está en vigor engulle, digiere y capitaliza cada una de las intervenciones de la resistencia, a partir de hoy mismo, ¿qué podemos hacer entonces?”
“Zygmunt Bauman: Usted ha puesto el dedo en la llaga apuntando a lo que quizás es el obstáculo crucial para que la constancia y la coherencia sean efectivas en nuestra sociedad de consumidores mediatizada y guiada por el mercado. Es la omnívora capacidad de los mercados de consumo, su misteriosa habilidad para sacar provecho de todos y cada uno de los problemas humanos, ya sean la ansiedad, la aprehensión, el dolor o el sufrimiento. Su habilidad para convertir cada protesta y cada impacto en una fuerza compensatoria que trabaja en pro de su propio beneficio y su ventaja. Por otra parte, dado que los mercados poseen el control absoluto de los canales de representación, publicidad y comunicación, a las fuerzas críticas y de la oposición no les queda otro remedio que actuar de acuerdo a las reglas del mercado. Y así, aun cuando sea de modo indirecto pero no menos potente, respaldan y refuerzan el gobierno de los mercados”.
Hasta aquí, parte de la espléndida conversación entre Bauman y Ricardo Mazzeo.
Ahora bien, traduciendo esta exposición del funcionamiento del sistema capitalista Tecnonihilista y trasladándola a la actual realidad política mexicana, hoy la oposición y sus gobiernos (PAN, PRI, MC) tienen que desenvolverse y tomar decisiones de acuerdo a las nuevas reglas que impone Morena.
“Por otra parte, dado que los mercados (Morena) poseen el control absoluto de los canales de representación, publicidad y comunicación, a las fuerzas críticas y de la oposición no les queda otro remedio que actuar de acuerdo a las reglas del mercado” sostiene Zygmunt Bauman.
Hoy, Morena, controla TODO. Los tres poderes. Tiene bajo su mando a las fuerzas armadas. De su lado, porque así lo demuestran con su pasividad, a las grandes empresas. Desde la mañanera, todos los días se lanza la línea informativa, comunicativa, a los diarios, a los gobernadores, a los liderazgos alineados al régimen.
Entonces, para poder triunfar desde la oposición y resistencia, lo primero que se tiene que entender es en qué terreno estamos luchando; en el terreno del régimen cuatroteista. Si no lo aceptamos, las estrategias chocarán con la realidad.
El mundo comunista, la cortina de hierro, fue derrumbada, porque quienes liderearon su derrumbe, fue porque comenzaron a aceptar luchar con las reglas impuestas por el régimen totalitario. Y desde ahí, comenzar a cavar su tumba. Y se logró.

Hoy, Esteban ha entendido que si quiere dar resultados a la ciudadanía y que los partidos que lidérela, PRI y PAN, sigan teniendo triunfos, unidos, deben aprender a jugar con las reglas impuestas por el régimen, pues de lo contrario, el final de estos gobiernos, es el que caracterizó el último año al régimen aispurista: desastre total.
En el mismo libro de Bauman, se describe el perfil de los liderazgos que bajo este régimen totalitario-capitalista tecnonihilista pueden triunfar:
“Aquí es donde interviene el tercer nivel de Bateson: sólo las personas capaces de saltar de una oportunidad a otra, capaces de actuar en condiciones de incertidumbre… sólo estas personas sobreviven y alcanzan el éxito (hasta nueva orden)”, sostiene Mauro Magatti, citado por Ricardo Mazzeo en su conversación con Bauman.